Las férulas dentales son dispositivos fabricados en materiales plásticos o resinas acrílicas que recubren total o parcialmente la arcada dentaria. Existen varios tipos de férulas, usaremos unas u otras en función del objetivo que se persiga con ellas.
– Férula de blanqueamiento: el objetivo es mantener el agente blanqueante en contacto con la superficie de los dientes. Se fabrican a medida para cada paciente, son flexibles y de poco grosor. Se utilizan en ambas arcadas en blanqueamientos domiciliarios.
– Férula de mantenimiento de ortodoncia: habitualmente conocidas como retenedores. Impiden el movimiento de los dientes después de un tratamiento de ortodoncia. Se fabrican a medida para cada paciente, son rígidas y de poco grosor. Se pueden usar en ambas arcadas o solo en una.
– Férula de periodoncia: evitan el movimiento de los dientes después de un tratamiento periodontal quirúrgico. Son hechas a medida, rígidas y de poco grosor. Pueden ser parciales o de toda la arcada, tanto para la parte superior como para la inferior.
– Férula de descarga: las utilizan pacientes apretadores o bruxistas. Cumplen varias funciones:
– Evitan el desgaste dentario.
– Retruyen la mandíbula llevándola a una posición en la que la musculatura masticatoria está más relajada.
– Evitan la contracción excesiva de la musculatura masticatoria.
– Encajan la mandíbula impidiendo que el paciente bruxe.
Son férulas hechas a medida, rígidas y gruesas. Se colocan en una sola arcada, habitualmente la superior y se suelen emplear para dormir. El dentista debe llevar un control periódico de la férula para que ésta esté perfectamente equilibrada y cumpla su función adecuadamente.
– Férula quirúrgica: son férulas hechas a medida, rígidas y de cierto grosor. Se utilizan como guías y fijación en una cirugía ortognática o como guías en una cirugía de implantes.
– Protectores bucales: protegen los dientes, labios, lengua, mucosas… durante la práctica de determinados deportes: boxeo, baloncesto, etc. Habitualmente se utilizan en la arcada superior, son blandos y de cierto grosor. Existen prefabricados pero los que mejor se adaptan son los que se hacen a medida en el dentista.
– Férulas para movimientos en ortodoncia: también denominadas alineadores. Sirven para realizar movimientos de ortodoncia de manera secuencial. Están hechas a medida, se usan en ambas arcadas, son rígidas y de poco grosor.
Queda claro que no todas las férulas son iguales, cada una tiene sus indicaciones y ha de cumplir una serie de requisitos. Por ello no debemos utilizar férulas que no hayan sido prescritas y revisadas por un odontólogo.